El cuidado temprano de la boca y los dientes de los niños no sólo está vinculado a la masticación adecuada y por tanto buena alimentación, sino al aprendizaje del habla y el poder pronunciar de forma correcta, así como a la prevención y preparación para una dentadura definitiva saludable.
Por tanto, es muy importante el seguimiento de los dientes temporarios (de leche) y de las funciones masticatorias del niño en visitas periódicas con el profesional especializado, a fin de identificar prontamente problemas que pueden afectar al desarrollo de los maxilares o de los dientes permanentes.
La educación en las técnicas de higiene desempeña asimismo un papel central para que los pequeños pacientes adquieran hábitos adecuados que favorezcan su maduración dental.
Los odontopediatras estamos preparados para el acompañamiento de los padres y contención de los niños brindando toda la información necesaria, seguridad y tranquilidad, de modo que la atención pueda desarrollarse en un clima de confianza y resulte una experiencia agradable.
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